GFI destaca importancia de las políticas de uso aceptable
GFI Software analiza los riesgos a los que se enfrentan diariamente múltiples organizaciones debido al uso inadecuado de los sistemas informáticos por parte de sus empleados.
Según un estudio de IDC, entre el 30 y el 40% del tiempo de navegación por Internet se dedica a la visita de páginas no relacionadas con la actividad laboral, y un 60% de todas las compras on-line se hacen durante las horas de trabajo. Los datos facilitados por IDC muestran que:
- El 70% de todo el tráfico de pornografía en Internet ocurre en horas de trabajo (de nueve de la mañana a cinco de la tarde).
- El 30-40% de la pérdida de productividad en las empresas se achaca a la ciber-debilidad.
- El 37% de los empleados afirma estar navegando continuamente en su trabajo.
- El 32,6% de los trabajadores navegan por Internet sin un objetivo específico, lo que es dos veces más probable en el caso de los hombres que en el de las mujeres.
- El 27% de las organizaciones Fortune 500 han tenido que defenderse de demandas por acoso sexual proveniente de e-mails de contenido inapropiado, enviados por sus empleados.
“Si bien la monitorización ha resultado ser una herramienta efectiva para identificar abusos en el uso de Internet, los expertos en RR.HH., al igual que los jueces, coinciden en que dicha monitorización debe verse acompañada de un esfuerzo claro y demostrable por parte de las empresas en reducir la actividad inaceptable de sus empleados», destaca David Kelleher, analista de Investigación y comunicación en GFI Software.
Un aspecto clave en toda esta problemática son las llamadas Políticas de Uso Aceptable o AUP, en sus siglas en inglés, basadas en un conjunto de normas específico, cuyo conocimiento los empleados deben demostrar a través de su firma. En esencia, las Políticas de Uso Aceptable sirven como guía para el equipo de la compañía, implicando comportamientos y un uso de la tecnología aprobado por la organización. Estas políticas deben detallar, asimismo, las consecuencias que el personal de la empresa debe esperar en caso de abusar de las tecnologías de la información en su puesto de trabajo.
“El principal objetivo de estas políticas, es eliminar cualquier expectativa por parte de los empleados de que el uso de sus comunicaciones, ordenador o Internet en el puesto de trabajo son confidenciales, por lo que deben prohibir cualquier uso de las comunicaciones que no esté relacionado con el trabajo», afirma David Kelleher. Con este fin, las Políticas de Uso Aceptable informan a los empleados que su superior puede acceder, revisar y monitorizar los mensajes de voz, correo electrónico o ficheros empresariales de cualquier trabajador que hayan sido creados, almacenados o borrados de un ordenador de la compañía.
Por otro lado, las Políticas de Uso Aceptable también definen las actividades consideradas inaceptables, especifican las posibles sanciones, avisan sobre la posible monitorización y transfieren la responsabilidad de los comportamientos inapropiados a los empleados que no respetan estas normas.
Fuente: GFI Software.